Leslie Berguño es paramédico en el SAMU Metropolitano y ya no daba más con el sobrepeso, no lograba bajar de peso. La resistencia a la insulina la tenía con obesidad y varias enfermedades asociadas. Se iba a someter a una cirugía para mejorarse, pero supo de Nutrición Inteligente. En ese momento su vida cambió. Veamos su historia.
¿Cómo conociste Nutrición Inteligente?
Un día vi un reportaje en un matinal y mi esposo lo leyó el mismo día en un diario. Comencé a pensar en ir porque estaba con obesidad, lo que me traía varias complicaciones. Y llegué a Nutrición Inteligente hace 5 meses.
¿Había algo en particular que te hacía estar con sobrepeso?
Sí, estaba con una resistencia a la insulina, que a pesar de estar en control con medicamentos, mantenía sus niveles altos. Había recurrido a diversos médicos, tratando de bajar esa resistencia, pero no daba resultados. De hecho estaba a punto de hacerme un bypass gástrico.
¿Qué enfermedades asociadas tenías?
Lo que pasa es que la obesidad es súper nociva para la salud. Tiene que tomarse como una enfermedad grave. Cuando tienes mucho sobrepeso tu organismo no funciona bien. Yo sufrí el corte de un menisco y también una enfermedad inmunológica, colesterol alto y un riesgo de sufrir un infarto.
¿Qué problemas te traían esas enfermedades?
Yo trabajo de paramédico en el SAMU Metropolitano, la obesidad no me permitía desempeñarme correctamente en mi trabajo. Además de la preocupación de que mi salud no estaba bien. Anímicamente tampoco estaba bien, andaba de mal humor, porque me cansaba mucho, ¡esto es algo que mejoré y lo agradecen mis hijos! De hecho comencé a hacer deporte con mi hijo mayor, lo que nos ha servido mucho para afiatarnos, conversar y disfrutar juntos.
¿Fue grande el cambio?
Sí, fue un gran cambio. Estos 5 meses han sido un gran aprendizaje. Además, al primer mes comencé a ver resultados y eso me motivó mucho más. Bajé 5 kilos los primeros 30 días y mi vida empezó a cambiar, porque me di cuenta de que me podía mejorar.
¿Cómo fue el tratamiento en Nutrición?
No fue para nada difícil. Hay gente que piensa que cuando estás con dieta pasas mucha hambre, pero yo no sufrí. Tuve que dejar los lácteos y todo lo que venga del trigo, comer mucha proteína como pavo, pescado y huevos acompañada de verduras, tomar mucho líquido, algunas frutas y frutos secos. Pero la dieta es personal, depende de tu genotipo y muchos otros factores. No es algo que se pueda replicar a otras personas.
¿Crees que mantendrás este cambio de vida?
Sí, por supuesto que sí. Te sientes tan bien que lo adoptas como una forma de vida y eso no creo que lo cambie nunca más.
¿Cómo fue el cambio en tu salud?
Fue un cambio total. Mi vida cambió por completo, tanto en la salud como en mi personalidad, porque al estar más delgada me siento más segura. Bajé casi 9 kilos en 5 meses y antes bajaba 500 gramos por mes. Con Nutrición Inteligente, en tres meses el colesterol llegó a valores normales y la resistencia a la insulina está bajo control. Algo muy importante es que de todos los medicamentos que tomaba, ahora ya no tomo ninguno, eso también es un ahorro y muy bueno para mi cuerpo.
¿Recomendarías Nutrición Inteligente?
Sí, es lo mejor que me ha pasado. Y por eso lo he recomendado. Me pasó algo muy divertido: Cuando empecé con la dieta yo estaba con licencia por la ruptura del menisco, y estuve 3 meses en casa. Cuando volví al trabajo mucha gente se sorprendió de mi cambio o simplemente no me conoció. Eso es rico, porque la gente ve el cambio y te dan ganas de seguir adelante. A todos les conté que esto lo debía a Nutrición Inteligente. Lo cuento a todo el mundo.